
DEPORTIVO 1 - 1 SD LOGRONÉS
Salió algo nervioso el primer jugador que repite de inicio este curso en el lateral derecho en la alineación, Víctor García. Como el equipo, fue a más, profundo en ataque, con la ayuda de Lapeña a su espalda.
Contagiado por la falta de determinación del Logroñés, el Deportivo tampoco aprovechó una salida a por uvas de Jero y el larguero impidió a Quiles convertir un córner que ejecutó Juergen Elitim en el 40’.
En peligro
Con la mínima renta, los de Raúl Llona se vieron dentro del partido y también tuvieron paciencia para encontrar fisuras en el Deportivo. Pasada la hora de encuentro, un centro desde la izquierda de Paredes la tocó Sandoval en el primer palo y no la pudo rematar a puerta Soberón. El técnico visitante apostó por jugar con dos puntas y a falta de poco más de quince minutos, Mackay evitó el penalti ante el recién incorporado Ander El Haddadi.
Señales de alerta
El Deportivo acabó el encuentro demasiado atrás y dio esperanza a su rival. Riazor le advirtió con silbidos para poner a los de Borja Jiménez en alerta. El Haddadi apuró a Mackay con un disparo desde la frontal y Jaime Sánchez tuvo que pedir el cambio. Fue triple. Granero, De Vicente y Doncel se incorporaron al césped y Juergen y Quiles se fueron al banquillo. Los coruñeses hicieron caso omiso de todas las señales de alarma. Los de Logroño pudieron marcar en el 93 y lo hicieron en el 94, en la última jugada, con un cabezazo de Ledo en una acción muy mal defendida por el colectivo. Decepción local por una pésima lectura y éxtasis visitante.