
El Deportivo volvió a caer en el mismo error de tantos partidos de la temporada pasada, que aún por encima es el más dañino. En Segunda si concedes atrás, los rivales te castigan, y eso mismo fue lo que privó a los coruñeses de su segunda victoria. La defensa blanquiazul se enfrentaba a su primer gran examen del curso y no fue capaz de sacar buena nota. Miguel de la Fuente y Duk evidenciaron todas las carencias defensivas que los herculinos sufren. Poco necesito el Leganés para castigar hasta en dos ocasiones.
11,65 segundos tardó el Dépor en mostrar sus debilidades. Cissé cogió desprevenida a la zaga coruñesa y sirvió un balón al espacio para Duk, que adelantó por la derecha a Sergio Escudero y se quedó mano a mano ante Germán Parreño. El guardameta impidió en gol en primera instancia, pero nada pudo hacer en el rechace. De la Fuente cazó el rebote y mandó a guardar el esférico. Gol encajado al inicio y todo el partido remando a contracorriente. Un saque de centro estudiado a la perfección por parte de Paco López para salir al campo con 1-0. Tan sencillo como efectivo. Tan mal defendido como evitable.
El Dépor encajó bien el primer golpe. El equipo pasó a ser dueño y señor de la posesión y encadenaba llegadas al área de Juan Soriano. Yeremay, en un par de ocasiones, y Villares pudieron igualar el marcador, pero no acertaron en el remate. No era alarmante. El equipo generaba peligro y el gol estaba al caer. La cuestión era no fallar en tu propia área, pero los coruñeses enseñaron de nuevo sus costuras. Saque de esquina y una sucesión de despejes fallidos propio de juveniles. Loureiro, Escudero y luego Villares perdieron las tres disputas de balón dividido. Duk volvió a castigar la falta de contundencia. Esta vez como goleador, tras anticiparse al ‘8’ del Dépor y superar con un disparo cruzado a Parreño. 2-0 abajo y todos con cara de tontos. El Dépor estaba bien en campo contrario, pero sus compañeros de atrás no colaboraban para la remontada.
Tras el descanso, Antonio Hidalgo introdujo tres sustituciones. Comas, Gragera y Eddachouri dejaron su sitio a Ximo Navarro, y a los debutantes Stoichkov y Samuele Mulattiere. Lógico, el equipo tenía que dar un paso al frente y atacar para tratar de darle la vuelta al resultado. Los herculinos acabaron el partido con cinco delanteros sobre el campo y solo jugadores de corte defensivo. Tampoco iban a poder defender peor.
Faltos de experiencia
El mercado de fichajes terminó y lo pasado, pasado está. El Deportivo, por decisión de su entrenador, apostó por cerrar los puestos del centro de la zaga con solo tres centrales puros. Dani Barcia, y los recién llegados Arnau Comas y Lucas Noubi. Tres defensores con una característica en común que salta a la vista. Su juventud. Ese es el perfil que buscaba Soriano para la línea en la pareja de zagueros, aunque corre el riesgo de de haberse quedado incompleto en cuanto a carácter y personalidad.
En Butarque se echó en falta ese defensor que liderase a sus compañeros y solventara con fuerza y sin miedo las situaciones en las que los blanquiazules flojearon. El central de antaño, que no hace prisioneros. Pero eso en A Coruña parece haberse perdido recientemente.
Al bajo número de efectivos en defensa hay que sumarle el poco protagonismo de Lucas Noubi. El belga, que causó baja en Butarque por su convocatoria con la sub-21 de Bélgica, no ha disputado ni un solo minuto de Liga en las tres primeras jornadas de competición. Loureiro ocupó el puesto de central las veces que Hidalgo reemplazó a Comas.
Una pareja sin nervio
Arnau Comas y Dani Barcia pasaron por muchos apuros a la hora de detener a los delanteros del Leganés, que cabe mencionar que goza de una de las parejas más temibles de LaLiga Hypermotion. El catalán volvió a ser sustituido por tercer partido consecutivo. El catalán no ha terminado ninguno de los tres encuentros de los que ha salido de inicio y evidencia la falta de ritmo de competición. No estuvo disponible durante gran parte de la pretemporada y se ejercitó durante varias semanas al margen del grupo en gran parte de los entrenamientos. En la gira por Inglaterra, ante el Middlesbrough, tuvo que retirarse al banquillo a los 20 minutos de partido y continúa sin estar a tope físicamente.
Por su parte, el canterano no ha comenzado de la mejor forma posible su segunda campaña en el fútbol profesional. Ante el Leganés estuvo impreciso con balón y blando en los duelos. Solo salió vencedor en 2 de las 12 disputas que enfrentó. Los delanteros referencia no son su especialidad. Ante el Burgos la semana pasada también fue superado por Fer Niño, que dio un recital de ariete.
Por mucho jugador diferencial que tenga el Deportivo en la zona de arriba, si necesitas marcar tres goles en cada partido, lo normal es que pierdas. O por lo menos que no ganes. A día de hoy, la defensa está muy lejos del nivel que tiene la última línea blanquiazul y encontrar un equilibrio es ahora mismo el gran reto de Antonio Hidalgo.