
El Deportivo reaccionó, pero lo hizo sin disipar las dudas. Ganó con una acción a balón parado y valiéndose de un error grave de Iricibar en la salida del balón. Acabó sufriendo, pero logró retener el liderato que le había quitado el Racing de Santander por la mañana.
Los calagurritanos borraron al Deportivo en el primer tiempo y trataron de sorprender a Mackay con disparos desde la frontal. Los blanquiazules, con Menudo en el once y dos delanteros, no elaboraron lo que le habria gustado a su entrenador. Apenas aparecieron en el área rival hasta el descanso.
En la segunda parte, con William por Menudo, hubo más verticalidad. En un cuerpo a cuerpo que aceptó el Calahorra, el Deportivo asestó dos golpes. Primero, en una falta lateral que convirtió un riojano, el defensa Adrián Lapeña. Después, rentabilizó la presión para robarle la cartera a Iricibar y anotar el segundo, obra de Quiles.
El Calahorra acabó con la tranquilidad de los blanquiazules a falta de cuatro minutos en una acción muy mal defendida, tanto en el centro lateral como en el remate de Carlos Vicente ante Aguirre. El Deportivo sufrió, pero pudo celebrar la victoria después de tres derrotas seguidas.