
Lo primero que llamó la atención fue el cambio de esquema de Mendilibar, que utilizó a un solo punta y a tres jugadores en la medular, probablemente para tratar de minimizar los errores defensivos que tan caros le han costado en las últimas semanas.
En el Alavés, la principal noticia fue la ausencia de Pacheco en la portería, y sorprendió también la titularidad de Dmitrovic en el EIbar, cuando parecía que no estaba recuperado.
El Alavés hizo sangre pronto al marcar a los tres minutos.
Los armeros se llenaron de coraje y se lanzaron a por la remontada, con lo que el encuentro se abrió.
Los locales igualaron el duelo en el minuto 68 y le dieron la vuelta en el último suspiro.