
Íñigo López jamás será recordado en A Coruña por su rendimiento en el terreno de juego, ya que su participación con la camiseta del Deportivo se redujo a 18 minutos en un solo partido de Liga.
Si el nombre del central cobró protagonismo fue por los asuntos extradeportivos.
El 28 de mayo, el central fue detenido dentro de la 'Operación Oikos' por su presunta implicación con una red de amaños de partidos, y dos días después fue puesto en libertad con cargos y con una fianza de 75.000 euros.
Más tarde, fue inhabilitado por el Comité de Competición y en junio, El Confidencial le vinculó con la compraventa fraudulenta de coches.