El sábado Rubén Martínez volverá a la que fue su casa, el Abanca-Riazor, para medirse al Deportivo. Inevitablemente las comparaciones estarán en la portería, donde le espera un duelo ante el cancerbero, también gallego como él, Dani Giménez, que le supera en muchos registros en estas catorce primeras jornadas.
El ex del Betis ha traído la calma a las turbulentas aguas que agitaban el arco blanquiazul, que contó hasta con cinco inquilinos el curso pasado, además del propio Rubén: Tyton, Francis Uzoho, Pantilimon y Koval.
Según los datos oficiales recogidos en la web de LaLiga, el portero herculino lleva 1.260 minutos disputados en 14 duelos, por 1.080 del cancerbero de Coristanco. El pontevedrés es el único jugador del Deportivo que ha competido íntegros los catorce partidos ligueros, mientras que Rubén no fue hasta la jornada tres cuando comenzó a ejercer en la portería.
Dani ha encajado 10 goles y ha dejado su meta a cero en cinco ocasiones, por 12 dianas en contra del portero rojillo y dos encuentros en los que no tuvo que recoger el balón del interior de su arco.
Menos despejes
El portero herculino ha realizado más paradas que Rubén (29 del pontevedrés, por 23 del coruñés), aunque este último gana en despejes de puños, salidas y centros interceptados. No obstante, en lo tocante a recuperaciones, suma más Dani Giménez, con 111 en su haber, por 95 del jugador de Osasuna.
Otra parcela en la que destaca el arquero deportivista es en los pases, donde demuestra su pericia en el juego con los pies, algo muy del gusto de Natxo González y característica que comparte con Adrián Ortolá, actualmente suplente en el cuadro blanquiazul.
Lleva un total de 386 pases, por 310 de Rubén, cuando la media de los porteros está en 227 en esta campaña. Es superior, sobre todo, en entregas en largo, donde suma 267, cuando por término medio se realizan 164,8. Un número algo inferior, 259, atesora Rubén.
El de Coristanco se ha afianzado en el once, después de un inicio, como el de todo el equipo, complicado. Desde el club lo han ‘blindado’, midiendo mucho las entrevistas que concede, después de la campaña muy complicada que vivió a nivel deportivo en A Coruña.
Un año difícil
Un curso marcado primero por su inoportuna lesión en un pulgar, que lo alejó de la portería, además de la alternancia que hubo en la misma, donde tardó en haber continuidad.
Tras regresar al once en la jornada 12 ante el Málaga, lo jugó prácticamente todo hasta la jornada 38, en la que ejerció Tyton frente al Valencia.
Su balance en 27 partidos fue de tres triunfos, nueve empates y 15 derrotas. Fue, además, el portero más goleado de Primera División la campaña pasada, encajando 58 tantos en contra.
Este sábado se verá las caras con Dani Giménez, presente del Deportivo y regresará a su pasado, al estadio herculino donde vivió una de las temporadas más aciagas de su carrera deportiva. l
