Un nuevo DXT, una vieja pasión
Este periódico que está a punto de ser treintañero estrena hoy una nueva edición digital. Como en muchos nacimientos el parto no ha sido sencillo, aunque debemos aclarar que el embarazo fue gozoso. En realidad todo ha sucedido en un pispás, enfrascados como estamos en el día a día. Así que ahí está la criatura, que ya de inmediato se lanza a dar sus primeros pasos. Nuestra voluntad es que bien pronto camine con prestancia y que tarde bastante en envejecer. Como la vida misma, vamos.
El caso es que tarde o temprano los cambios son necesarios y DXT se acicala para estar más cerca cada día de sus lectores en los diferentes formatos que se exigen en un entorno tan cambiante como el que pide respuestas a los medios de comunicación. De eso va esta labor, de no quedarse parado ni adocenarse en la rutina, de vivirla siempre con pasión. DXT nació como un diario, pero ya no lo es. Es diario en su formato en papel, pero renueva su compromiso con los lectores cada vez que publica una información. Y ese acontecimiento ya no se produce una vez al día a primera hora de la mañana.
En ese objetivo, el periodista debe asumir que su mensaje puede llegar de formas más variadas que las que se estilaban hace tres décadas, que la gente quiere saber lo que, por ejemplo, sucede en el Deportivo y puede hacerlo a través de un texto, pero también mediante un reel de Instagram, una publicación en TikTok o un post en cualquier otra red social.
Nada de lo que hacemos en un ámbito como el de la información deportiva podría salir adelante en un entorno de desilusión. Por eso es tan grato que este paso adelante que da el Grupo Editorial El Ideal Gallego se produzca justo cuando el Deportivo ofrece su mejor versión de los últimos años. Soñamos con un equipo grande y queremos contarlo con las mejores herramientas y los mejores profesionales. Entendemos también que el deporte que nos rodea no viste sólo de blanquiazul y por eso estamos atentos a las diferentes disciplinas y sensibilidades. DXT es un gran periódico en la medida que el censo de deportes a los que presta cobertura es cada vez más mayor.
Y entre todas estas intenciones subyace una intención clara, la de ejercer la crítica y el apunte para que todos seamos cada vez mejores. Aunque a veces no sea gustosa para según quien se crea afectado. DXT no prestaría un buen servicio a su comunidad si, por ejemplo, no se hiciese eco de situaciones como la que se produjo este domingo en los campos de A Torre, donde un futbolista del Montañeros tuvo que esperar casi media hora a que llegase una ambulancia tras sufrir un golpe en la cabeza.
El episodio arrojó luz sobre una vieja demanda que brota cada cierto tiempo, la de que en los campos de fútbol de la ciudad en los que cada fin de semana compiten miles de personas desde edad prebenjamín a veterana no dispongan de un servicio médico que les preste cobertura. Descolgar el teléfono para preguntar a las instituciones que deberían estar implicadas en solucionar este aspecto nos llevaría también a otro tipo de deporte, el tenis de mesa, o más bien al ping-pong.
Ese tipo de prestación a los deportistas que evolucionan en nuestra ciudad es manifiestamente mejorable. En eso por esta Redacción estamos a otro nivel. Nace un nuevo DXT y lo metemos en la incubadora porque no es perfecto y debe nutrirse hasta valerse por sí mismo. En las últimas horas nos hemos llevado algún susto. Pero al menos aquí ya tenemos asistencia. Así que si algo falla o se ve fuera de lugar tengan, por favor, paciencia y consideren que tenemos la ambulancia delante de la puerta y nos auxiliará para que, si en algún momento tenemos que salir del campo (error 404) y reanimarnos en la banda, podamos entrar de inmediato a seguir dando guerra.
En 1995 nació DXT. Entonces apenas un centenar de periódicos en el planeta disponían de edición digital. Hoy es el paradigma. Este artículo tendrá más lectores en un teléfono que sobre el papel. Ni es bueno ni malo. Esa es la realidad, que diría Lendoiro. La auténtica realidad.


