El Paiosaco mantiene plena confianza en su técnico Christian Gómez
Fuentes de la directiva ratifican al entrenador carballés tras un inicio en el que los resultados no están acompañando

No se prevén cambios en el banquillo. Ese es el mensaje claro que transmite la directiva del Paiosaco respecto a la situación de Christian Gómez, quien afronta su primera temporada al frente del equipo. Los resultados iniciales no han acompañado —el equipo suma 3 puntos de 18 posibles y ocupa la penúltima posición en el grupo 1 de Preferente Futgal—, pero el club de A Porta Santa mantiene su línea de trabajo basada en la paciencia y la confianza en los proyectos. En este caso, no es la excepción: consideran que la reacción llegará bajo la batuta del preparador carballés.
Tras dos temporadas en Tercera Federación en las que el Paiosaco compitió muy bien y descendió en la última jornada en mayo de 2024, el curso pasado fue irregular en Preferente. Era la cuarta campaña con Diego Armando García al frente y el equipo se mantuvo en una zona intermedia hasta que apretó al final para quedar en una séptima posición que no dio acceso al playoff. No tanto por motivos deportivos, sino por entender que se había cumplido un ciclo temporal, en el club entendieron que era momento de hacer un cambio de rumbo en el banquillo y llegó Christian Gómez, técnico de la casa de 29 años que acababa de ascender con el Juvenil a Primera Futgal. Además, conocía bien el primer equipo tras haber sido coordinador y segundo entrenador durante dos campañas.
El equipo inició el curso en Gallamonde contra el Miño y, pese a adelantarse con gol de Cristian Quintás, vio como Rubén Lozano empataba en el tramo final de penalti. A continuación, el Paiosaco empató sin goles en casa ante el Victoria, cayó en O Val por 1-0 y volvió a igualar a ceros en A Porta Santa frente al Dumbría. Un arranque extraño, con tres puntos en cuatro partidos, un solo gol a favor y apenas dos en contra, tras el que el capitán Josiño transmitió un mensaje de calma, ponderando el nivel de la plantilla y hablando de encuentros que se decidieron por detalles.
Pero lo que ha terminado por disparar las alarmas son los dos partidos posteriores, sendas derrotas ante el Burela (3-2) y el Puebla (1-2). Ahí el equipo encontró por fin el gol que parecía perdido, pero encajó en exceso. Por momentos, adoleciendo de falta de equilibrio, algo que le suele suceder a los clubes grandes de una categoría que están más abajo de lo esperado. Un buen ejemplo fue la segunda mitad ante el Puebla, donde el equipo generó ocasiones de peligro mientras iba por debajo en el marcador, pero concedió contraataques muy claros al rival.
Sea como sea, en el Paiosaco entienden que este entrenador y esta plantilla tienen todavía mucho que decir y que, manteniendo la calma, los resultados empezarán a llegar. La primera oportunidad será este domingo en el campo del Cultural Maniños, decimotercero en la clasificación con seis puntos.

