El Bergantiños reacciona y salva un punto en Luanco (1-1)
Un gol de Ander Barck tras el descanso permite sumar a los carballeses en un mal día en la oficina

Gracias a un gol de Barck a los 16 segundos de juego de la segunda parte, el Bergantiños reaccionó a tiempo y se redimió de una olvidable primera parte para sumar su primer punto a domicilio de la temporada. El cuadro carballés había recibido el 1-0 en el final de una primera parte en la que pecó de exceso de confianza, aunque tras el paso por los vestuarios cambió de chip y consiguió firmar un empate que le permite seguir en la zona tranquila de la clasificación.
A excepción de la novedad de Barck en detrimento de Álex Pérez, Simón Lamas apostó por dar continuidad al mismo once inicial con el que en la jornada previa su equipo había empezado a construir el meritorio triunfo frente al Numancia. Sin embargo, el estado de confianza en el que venía instalado el Bergan no impidió que en los compases iniciales del choque le costase maniatar las posesiones del Marino, que, con mucho criterio, consiguió progresar en el juego con fluidez hasta protagonizar la primera ocasión clara del partido. El central del perfil derecho, Somolinos, ganó altura en el terreno de juego para cazar la segunda jugada en la zona de tres cuartos de campo y ejecutó una volea frontal. El golpeo, tras un peligroso bote en el césped, se topó con la sobria respuesta por parte de Santi Canedo.
Después del primer aviso del conjunto luanquín, el Bergantiños continuó sin sentirse cómodo sobre el tapete de Miramar. Y es que el conjunto gozoniego, forzando faltas peligrosas en los últimos metros de campo, mantuvo en alerta constante a la línea defensiva del cuadro carballés.
Nuevamente, aunque esta vez a la salida de una falta lateral, la escuadra asturiana se hizo ganadora de la segunda jugada en el balcón del área. Para fortuna de los intereses del colectivo rojillo, la volea de Tito se marchó fuera a escasos centímetros del palo. Los problemas se acrecentaron para los pupilos de Simón Lamas, que denotaron falta de viveza en el partido. Así se escenificó en una falta desde terreno local con la que el Marino, en las botas de Borja, se plantó en una situación clara de centro. Fito y Nacho Pastor tuvieron que achicar aguas en la frontal del área pequeña para bloquear sendos disparos cercanos.
A pesar de no sentirse con fuerza en el juego, el Bergantiños se mostró maduro para salir indemne de una primera media hora en la que el Marino corroboró que había aprendido la lección sufrida en su eliminación de la Copa Federación a manos del cuadro carballés. Ya inmersos en el epílogo del primer acto, los pupilos de Simón Lamas por fin consiguieron enlazar un mayor número de pases en campo contrario, aunque sin asaltar la profundidad con claridad. Y, cuando parecía que el conjunto rojillo iba ganando confianza a través de la repetición de pases sencillos, antes del descanso llegó el merecido tanto local. Tito intuyó mejor y más rápido que nadie el errático pase atrás de Nacho Pastor hacia Santi Canedo para, tras recuperar el balón y regatear al guardameta, marcar a placer el 1-0.
Si deseaba no regresar de vacío de tierras asturianas, en la segunda parte el Bergantiños estaba obligado a ofrecer una cara opuesta a la enseñada en un primer tiempo en el que apenas inquietó al guardameta local, más allá de un disparo lejano de Isma Cerro. Y la reacción no se hizo esperar, pues nada más arrancar el segundo acto, concretamente a los 16 segundos, el equipo carballés logró devolver la igualdad al marcador. Todo empezó con la recuperación de balón en campo propio por parte de Sola y el cambio de orientación de Marru hacia la posición de Barck en la banda opuesta. El jugador vizcaíno persistió en el esfuerzo de la presión y forzó el defectuoso pase atrás del defensor local para, metiendo la puntera ante la apresurada salida de Dennis, acabar materializando su primer tanto con la camiseta roja tras haber aterrizado este verano procedente del Basconia. El Bergantiños no pudo rentabilizar mejor su eficacia, ya que consiguió anotar en su primer disparo a portería.
La diana firmada por Barck sirvió para que los pupilos de Lamas ganasen confianza con el balón y transmitieran más amenaza en campo contrario. Como cuando construyeron un ataque vertical en el que conectaron en la frontal del área con Isma Cerro. El jugador cacereño, que vivió un encuentro especial al regresar a un campo donde la pasada temporada llegó a marcar nueve goles en Segunda Federación, buscó con determinación e intención su primer tanto liguero este curso, aunque finalmente su disparo, sin dejar botar el balón en el césped tras controlar el esférico con el pecho, no encontró la portería rival.
La inercia ofensiva del Bergantiños tras el gol de Barck no disfrutó de continuidad y en la segunda parte imperó la máxima igualdad en el centro del campo. Ningún equipo fue capaz de localizar la ventaja en las inmediaciones del área rival, hasta que Borja, carrilero derecho del Marino, encontró una rendija en el último tercio del campo para poner en apuros el punto que estaba cerca de sumar el conjunto de Lamas. El primer remate de cabeza del asturiano a la salida de una falta lateral se marchó rozando el palo, mientras que su postrero disparo a bocajarro desde el interior del área se topó con la salvadora intervención con los pies por parte de Santi Canedo.
Ficha técnica
Marino de Luanco: Dennis; Borja, Somolinos, Orfila, Tomás, Dailos (Guaya, m.89); Íñigo, Pelayo (Chus Ruiz, m.80), Lora (Marcos Bravo, m.46), Álex Basurto; Tito (Marti, m.60).
Bergantiños: Santi Canedo; Peñalver, Fito, Nacho Pastor, Sola; Tass, Diego (Álex Lorenzo, m.54); Barck (Álex Pérez, m.54), Iago Novo, Marru; Isma Cerro (Pablo Rubal, m.76).
Goles: 1-0, m.40: Tito; 1-1, m.46: Barck.
Árbitro: Mazo Maruri (Castilla y León). Amonestó a Lora, del Marino de Luanco; y a Tass y Peñalver, del Bergantiños.