Pellicer se la juega ante el Dépor desde la grada
Solo un triunfo aseguraría la continuidad del ex del Fabril en el Málaga; cumple su segundo partido de sanción tras su expulsión en Burgos

“Hay que sentir el dolor para levantarse”, manifestó Sergio Pellicer el pasado domingo, después de que el Málaga encajara, en Santander, su cuarta derrota consecutiva de la temporada. El 3-0 ante el Racing hizo caer a su equipo hasta los puestos de descenso, apenas un mes después de pisar la zona de playoff, y deja al exentrenador del Fabril inmerso en su momento más complicado desde que ocupa el banquillo de La Rosaleda.
El técnico castellonense afronta su tercera etapa en el cuadro andaluz. Arrancó en la cantera malacitana en 2015, al frente del Juvenil de División de Honor, con el que conquistó la Copa de Campeones en 2016, tras imponerse al Sevilla en la final en la tanda de penaltis. El título permitió al conjunto de Pellicer disputar la previa de la Youth League en el verano de 2016, pero tras eliminar al Nitra eslovaco en la primera ronda, el Málaga cayó en la segunda con el Midtjylland danés. En diciembre de 2016, se incorporó al cuerpo técnico del primer equipo como ayudante y encargado de preparar las acciones de estrategia.
Etapa en el Fabril
Esa primera etapa en el Málaga finalizó en octubre de 2018, cuando se hizo cargo del Fabril, que competía en Segunda B. El castellonense sucedió a Tito Ramallo en el banquillo del filial blanquiazul tras la novena jornada, pero apenas duró catorce partidos al frente del segundo equipo deportivista. Fue destituido tras la jornada 23ª, con el cuadro fabrilista como colista del Grupo 1 con catorce puntos, a trece de la permanencia.
Pellicer retornó a la entidad malacitana a mediados del curso 2019-20. Se sentó en el banquillo andaluz por primera vez en la jornada 23, en Segunda División, después del despido de Víctor Sánchez del Amo. Dirigió los 20 últimos encuentros de aquella campaña y logró la permanencia. El levantino completó la siguiente temporada, también en la categoría de plata, y el Málaga acabó en mitad de la tabla.
Tras ese curso, no continuó en La Rosaleda y entrenó al Fuenlabrada entre las jornadas 21 y 30 de la temporada 2021-22, en Segunda.
La tercera etapa de Pellicer en el conjunto malacitano arrancó a finales de enero de 2023. El castellonense tomó las riendas del equipo tras la jornada 24, con el cuadro andaluz instalado en descenso, a cuatro puntos de la salvación.
Pellicer no pudo evitar que el Málaga cayera a la Primera RFEF. Aun así, continuó en el banquillo y al curso siguiente, el 2023-24, guió a los andaluces a su retorno al fútbol profesional.
La pasada campaña, el Málaga logró la permanencia, aunque fue de más a menos a medida que avanzó el curso y no certificó la salvación hasta la antepenúltima jornada.
Un proyecto ambicioso
La directiva malaguista confió en que Pellicer dirigiera el proyecto también en esta temporada 2025-26 y, con la intención de dar un salto de calidad que les permitiera pelear por el ascenso a Primera División, realizaron siete fichajes en verano y un importante desembolso en cuatro de ellos, Adrián Niño, Carlos Dotor, Javi Montero y Darko Brasanac.
El cuadro blanquiazul abrió la competición con dos triunfos y dos empates que le permitieron instalarse en la sexta posición —la última del playoff de ascenso— tras la cuarta jornada, con ocho puntos.
Desde entonces, los andaluces han encadenado cuatro derrotas frente a Huesca (1-0), Cádiz (0-1), Burgos (2-1) y Racing de Santander (3-0). Este último tropiezo ha dejado muy tocada la credibilidad de Pellicer, dado que la directiva entiende que con los refuerzos del verano, el Málaga debería estar mucho más arriba en la tabla, a pesar de las lesiones que llevan castigando al equipo desde el inicio de temporada.
De los fichajes estrella, Niño comenzó como titular, pero unos problemas en el tobillo le han impedido jugar tres encuentros. Montero ha sido titular en las ocho primeras citas, pero será baja ante el Dépor por la roja que vio ante el Racing. Dotor ha sido más suplente que titular y Brasanac apenas ha jugado 98 minutos.
La dirección deportiva entiende que Pellicer no ha sabido sacar rendimiento a sus jugadores y su continuidad en el banquillo pende de un hilo. Se la juega ante el Dépor, frente al que cumplirá el segundo de los tres partidos de sanción que le cayeron tras su expulsión frente al Burgos.

