Una exhibición de Dídac Cuevas mantiene en la Copa al Leyma (68-77)
El base del equipo coruñés suma 21 puntos, 9 asistencias y 7 rebotes vitales para apear al Menorca en una trabajada victoria de los naranjas

Bajo la batuta de Dídac Cuevas el Leyma solventó un duro trago copero en Menorca, una victoria (68-77) que tiene miga porque el equipo sigue en la carrera por ganar una competición que tiene un premio suculento además del de nutrir las vitrinas del club, el de la ventaja de campo en caso de jugar el playoff de ascenso a la ACB. El triunfo, trabajadísimo, llegó entre estrecheces porque el equipo el Leyma porque anda corto de rotación. Sin refuerzos a pesar de tener una ficha libre y el halo de incertidumbre que hay sobre el futuro de Mencía en el club, con Pacheco lesionado y la obligación de que Dídac Cuevas asuma muchos minutos en pista llegó también, cuando aún no iba ni mediado el segundo cuarto, una lesión de Joe Cremo, que se dañó la espalda cuando al fin estaba dando el rendimiento que se le supone.
El exjugador del Fuenlabrada se retiró al banquillo con siete puntos anotados cuando el Menorca estaba en ventaja (24-23) y no volvió a saltar a la pista. Se fue justo cuando acababa de tomar el timón del partido el cuadro de Mahón, que siempre fue por detrás en el inicio, anclado a una zonita que desmontó a base de triples el equipo de Carles Marco, pero que llegó a manejar una ventaja de nueve puntos en el segundo cuarto. Pero Cuevas no estaba por perder el partido, con 21 puntos, siete rebotes, nueve asistencias, cuatro robos de balón y cinco faltas provocadas se fue a los 36 puntos de valoración en algo más de 31 minutos de juego. Un MVP con todas las letras, aplaudido por la afición local cuando Marco le dio descanso a escasos segundos del último bocinazo.
El partido comenzó y acabó con dominio naranja, pero entre medias fue un dolor de muelas. De inicio apenas se generaron distancias entre los dos equipos. Hasta cuatro puntos de ventaja se dispararon los naranjas tras un triple de Cuevas (14-18), un alivio tras unos minutos en los que el veterano Víctor Arteaga martilleó el aro del Básquet Coruña. Se sostenía el equipo de Carles Marco a base de puntería. Se cayó cuando dejó de hacerlo para firmar un pírrico 5 de 18 en triples al descanso, un serio problema cuando se tira más de tres que de dos. Al equipo le dolió la lesión de Cremo, pero también la tibia aportación de Jorgensen, que entró gélido al choque, y la escasísima producción ofensiva de Diop, con la muñeca desajustada en canastas que debían ser fáciles y que escupía el aro. Su aportación en ataque fue mala, cinco tiros intentados y todos fallados, apenas cuatro puntos que llegaron desde la línea de tiros libres. Tampoco en el rebote dio lo que se le debe exigir, apenas dos capturas, una en defensa y otra bajo el aro menorquín.
Pero Cuevas recogió compañeros de camino que se fueron subiendo al tren que pilotaba hacia la victoria. Brnovic le ayudó en los peores momentos del equipo, poco después de la lesión de Cramo, siempre atento para todo tipo de intendencia el alero montenegrino. Pero pasó lo que tenía que pasar, que Menorca no sólo se puso en ventaja sino que empezó a pensar que la eliminatoria estaba a su alcance. Adams Sola llevó a los locales a una primera máxima ventaja (31-27) y Carles Marco se revolvió en el banquillo para pedir dos tiempos muertos en apenas un minuto. Un triple de Molins y otro de Vicedo dispararon las alarmas porque Menorca se marchó ocho arriba (37-29), así que el Leyma se aplicó en defensa para tratar de descontar y no llegar al descanso descolgado en el marcador. Cuevas y Brnovic volvieron a liderar las operaciones y mal que bien se salvó la situación con un 41-36 para irse al receso.
Lamidas las heridas, el Leyma regresó a la cancha con otra cara. Más que nada porque Paul Jorgensen llegó al partido y eso son palabras mayores. El equipo entendió además que sus opciones pasaban por la defensa y se aplicó en cerrar su aro de tal manera que en el tercer cuarto Menorca apenas anotó nueve puntos. Para entonces la rotación de Carles Marco se achataba. Cremo no estapa operativo, pero tampoco contaba Macachi, que salió en el cinco inicial, pero acabó aparcado en el banco. Pero el Leyma se creció ante los problemas, mostró orgullo y capacidad para revolverse contra su fortuna. Jou, atinado desde la larga distancia, acortó distancias con un triple (43-42) y Jorgensen acabó de meterse en el partido con una penetración imparable sobre Arteaga y una canasta de tres para poner al Leyma por delante (48-49).
Ahí empezó otro partido, por más que Arteaga (7 de 11 para ser el máximo anotador de su equipo) se empeñase en dominar bajo tableros. Thiam logró controlarle en los instantes críticos y el Menorca empezó a sufrir ante la exhibición de Cuevas, que lanzó a su equipo a la máxima ventaja tras un robo de balón a Pol Figueras y canasta fácil (50-57). Se resistieron los locales. Sola y Vicedo anotaron dos triples casi consecutivos y llevaron el marcador a un 66-68 a 3.12 del final. Pero ahí Cuevas sacó de nuevo su magia, forzó una antideportiva de Littleson, anotó los dos tiros libres y en la jugada siguiente, relanzó de nuevo a su equipo y solventó el partido con un festival en el que mutó en Stephen Curry para anotar desde diez metros y liquidarlo todo. A lo grande. En octavos de final el Leyma se cruzará ante el ganador del emparejamiento entre el CB Zaragoza, de Segunda FEB, y el Tizona burgalés.
Menorca 68-77 Leyma Coruña
MENORCA (19+22+9+18): Cone (9), Galette, Molins (3), Wembi (11), Sola (7) –cinco inicial– Vicedo (11), Pons, Figueras, Littleson (13), Lobo y Arteaga (14)
LEYMA (21+15+17+24): Cuevas (21), Cremo (7), Jou (10), Macachi, Diop (4) –cinco inicial– Jorgensen (11), Brnovic (7), Jacobo Díaz (12), Thiam (10) y Varela.
ÁRBITROS: Morales, García Santos, Soto. Sin eliminados.
INCIDENCIAS: Partido de 1/16 de final de la Copa España disputado en el Pavelló Menorca ante menos de un millar de aficionados.
