
El Coliseum acogió este lunes la presentación oficial de Caio Pacheco, la única, hasta el momento, individual, ya que el base internacional brasileño no llegó a tiempo para la de la plantilla, que tuvo lugar el pasado jueves, después de conquistar el 31 de agosto, la AmeriCup.
Pacheco, que debutó de naranja el sábado, en la final de la Copa Galicia contra el Breogán, ya había compartido vestuario con cuatro de los jugadores del plantel que entrena Carles Marco: Jacobo Díaz, Dídac Cuevas, Abdou Thiam y Joe Cremo, este último ausente, por motivos personales, en el torneo autonómico.
Charlie Uzal, director deportivo del club, tomó la palabra en primer lugar. Mostró su "orgullo" por tener a un campeón de la Americup" y alabó que el base "el otro día disputó algunos minutos en la final de la Copa Galicia, pero sin apenas entrenamiento. Algo de tiro por la mañana y un poquito de playbook. Quiso hacer el esfuerzo de intentar ayudarnos, y creo que es de alabar".
El jugador procedente del Tizona respondió que "ninguno en particular" a la pregunta de si alguno de sus compañeros en temporadas precedentes habían tirado de él para decidirse por el Básquet Coruña, aunque admitió que "sí hizo más fácil que viniera. Saber que iba a tener compañeros con los que he compartido cancha y vestuario fue algo muy importante para mí. Tanto como el proyecto que el club me presentó desde el comienzo; fue realmente lo que yo estaba buscando para mi carrera y para mi vida personal. Juntando las dos cosas, se hizo el camino perfecto para pudiera llegar".
Adaptación bastante fácil
Respecto a las primeras horas en el club naranja, el flamante campeón de América reconoció que el hecho de conocer a tantos jugadores hizo "bastante fácil" la primera toma de contacto. "Físicamente, obviamente no estoy al cien por cien. Tuve la oportunidad el viernes de ver el partido [contra el Obradoiro] y me ha gustado mucho. Lo que tenía hablado con el club y con Carles [Marco] era que yo no participaría en la Copa Galicia, porque llevo una carga bastante larga este verano; estuve más de cincuenta días con la selección. Me ilusionó mucho ver cómo jugó el equipo, dando el por cien por cien, muchos terminaron muy cansados. Y además teníamos la falta de Joe [Cremo]. Realmente no había mucho que pensar. Hablé con Gus [Gago] y Carles. Pensé: 'Si puedo descansar bien de noche y me encuentro bien, les ayudaré con los minutos que necesiten'. Y fue lo que pasó".
Carles Marco comentó a Dxt Campeón el pasado jueves, en el acto de presentación del resto de la plantilla, que Pacheco aprovecharía el viaje para leer el libro de jugadas del técnico badalonés. Pese a todo, el base admite que debutar en la Copa Galicia "no era la idea" inicial. "Pedí el playbook a los entrenadores, porque yo, como base del equipo, tengo que saberlo de arriba a abajo. Es un viaje largo, son trece o catorce horas de vuelo, donde no hay mucho más que hacer que descansar o ver una película o leer un poco. Y aproveché para ir estudiando el playbook, y eso creo que me ayudó para el sábado poder jugar más tranquilamente, al saber ya las jugadas".
Caio tiene claro lo que desea para esta temporada. "El proyecto fue lo principal para mí. Ojalá podamos cumplir el objetivo. No hay que ser hipócritas; sabemos que estamos jugando objetivo por estar arriba peleando por intentar el ascenso. Ojalá poder ascender y estar mucho años en la ACB, pero hay que pensar día a día. Paso a paso, paso a paso, porque no nos sirve estar pensando ya hacia adelante sin hacerlo día a día".
Dídac Cuevas y Caio Pacheco coincidieron en el Tizona. El brasileño subraya que "llegamos a coincidir en cancha. La relación que tengo con él es muy buena. Nos conocemos desde esa época, pero el año pasado también compartimos ciudad y los dos equipos [Tizona y San Pablo] entrenábamos en el mismo lugar, así que estábamos todos los días juntos. Pero eso será una decisión de Carles, no nuestra. Sabemos que tenemos dos bases muy importantes en la categoría y cada uno aprotará lo que pueda aportar. Estoy muy contento de volver a compartir equipo con él. Y con los otros compañeros".
Polivalencia
Por estatura y físico el brasileño puede jugar perfectamente de escolta, un puesto que no le es ajeno. "La verdad es que me es bastante cómodo. Hasta los 16 ó 17 años no jugué de base, era un '2', un escolta goleador. Con el tiempo me fui convirtiendo en un '1' y ahora es mi posición, pero no tengo ningún problema, atrás tampoco, puedo defender a un '2' o a un '3' del otro equipo. Y ofensivamente sé que tengo el gol en la mano", incidió.
"Primero de todo, un jugador que va a dar el cien por cien todos los días, en los partidos, los entrenamientos, en las sesiones de pesas, lo que sea...", contestó a qué tipo de jugador va a disfrutar la afición naranja. "Creo que soy un jugador bastante revulsivo, físicamente fuerte, puedo correr muy bien, con el gol en la mano, que puede asistir... Tengo muchas facetas en las que puedo ayudar al equipo. Suelo hacer lo que sé hacer y espero dar muchas alegrías a la gente de Coruña".
A la hora definirse con una sola palabra, Pachecho, suspira, duda. Al final, entre "guerrero o gladiador" decide quedarse con la primera.
El nuevo base del Leyma Básquet Coruña luce un acento argentino como si hubiese nacido en Buenos Aires. Fruto de sus primeros años como profesional en el equipo Bahía Blanca. La primera de sus aventuras fuera de Brasil, un viaje que pasó también por Italia y México. El deseo ahora es echar raíces aquí. "La experiencia en diferentes países es muy importante para mí, aunque me siento muy bien acá en España y tenía muchas ganas de seguir aquí. Cada país me dejó aprendizajes, pero ojalá pueda seguir en España el resto de mi carrera, porque me siento muy bien. Hace solo cuatro días que estoy en A Coruña, pero la verdad es que la ciudad me está encantando; el clima, la gente... Ahora, a empezar a probar la comida y, de a poquito, ir conociendo todo", concluyó Caio Pacheco.
