11.65 segundos tardó el Deportivo este lunes en encajar el primer gol en Butarque. Tras sacar del centro del campo, Cissé sorprendió a la defensa coruñesa con un balón largo sobre Duk, que salió en carrera y pilló dormida a toda la zaga, incluido Germán Parreño, disparó y el rechace, tras impactar con el portero, lo cazó De la Fuente para firmar el 1-0. Casi no dio tiempo a reaccionar y el Dépor ya perdía. Fue un gol a un ritmo vertiginoso, pero aún ha habido tantos más rápidos en Segunda División y en la historia del fútbol español en general.
Curiosamente, el futbolista que menos tiempo tardó en firmar un gol en la categoría de plata fue Juan Diego Molina ‘Stoichkov’, delantero del Deportivo desde el pasado viernes. El gaditano marcó el 1-0 que dio la victoria al Eibar frente al Amorebieta el 13 de marzo de 2022 en solo 8.7 segundos. La asistencia se la sirvió un exblanquiazul, Ager Aketxe. Después de dos toques rapidísimos, tras el saque del centro del campo, el balón le llegó al futbolista bilbaíno, que buscó la espalda de la defensa del Amorebieta y el esférico cayó a los pies de Stoichkov, que aprovechó una mala salida del guardameta para batirle.
Aquella diana del ahora jugador del Dépor le sirvió para romper el récord anterior de Segunda División, en poder de Uros Djurdjevic. El atacante montenegrino tardó 9.5 segundos en materializar el 1-0 con el que el Sporting se impuso al Granada el 12 de abril de 2019.
Aún ha habido otras dianas más rápidas en Segunda División que la encajada por el Deportivo en Butarque, como la de Landry Dimata, del Espanyol, en el campo de la Ponferradina el 18 de mayo de 2021. El congoleño anotó el primero de los cuatro tantos visitantes (1-4) en 10.2 segundos.
Eso fue en la categoría de plata, pero el autor del gol más rápido de la historia del fútbol español es Joseba Llorente. Solo habían transcurrido 7.22 segundos del Valladolid-Espanyol, correspondiente a la jornada 20ª de Primera División, cuando el Pucela ya mandaba 1-0 en el marcador. Fue tan rápido, que al propio técnico blanquivioleta, José Luis Mendilibar, no le dio tiempo a ver el tanto, ya que solía sentarse en el banquillo con el partido empezado.
El mítico Víctor, que jugó en el Valladolid y posteriormente en el Villarreal, fue quien asistió a Llorente con un pase que pilló por sorpresa a la defensa espanyolista. Fue la culminación de una acción que ambos futbolistas hablaron en el túnel de vestuarios y que, unos instantes después, llevaron a la práctica con éxito.
