Mendizorroza, estadio de casi 20.000… pero con sitio para solo 387 deportivistas: lío con las entradas del Mirandés-Dépor

A nueve días del Mirandés-Dépor, la polémica ya está servida. El club burgalés ha enviado al Deportivo únicamente 387 entradas para su afición, en un estadio como Mendizorroza con capacidad para casi 20.000 espectadores. Una cifra que sonrojante si se recuerda que el año pasado, en Anduva (con apenas 6.000 localidades), fueron 350. El resultado: apenas 37 entradas más… pero con tres veces más asientos disponibles.
La noticia ha indignado al deportivismo, que no entiende por qué, en un campo que en la jornada 2 ante el Huesca apenas congregó a 3.683 personas —dejando más de 15.000 asientos vacíos—, se restringe de esta manera la presencia visitante.
Los 387 afortunados que viajen a Vitoria deberán pagar 25 euros por entrada, una cifra bastante elevada si tenemos en cuenta la capacidad de este estadio y la cantidad de asientos vacios que habrá, una situación que invita a reflexionar sobre la idea de fijar un coste determinado, y una cifra mínima para las localidades de las aficiones visitantes. Una medida que en otras ligas europeas ya es norma, pero que aquí sigue siendo un brindis al sol mientras se ponen trabas a los que intentan seguir a su equipo por todo el país.
El Deportivo anunció que la prerreserva se activaba este jueves 4 y estará abierta hasta el sábado 6 a las 21:00. Si hay más solicitudes que entradas, que las habrá, se hará un sorteo el domingo 7. Los elegidos tendrán que retirar las localidades antes del martes 9, o pasarán a los suplentes, que tendrán de margen hasta el miércoles 10.
El Mirandés, exiliado temporalmente en Mendizorroza por las obras en Anduva, parece haber decidido que el gran estadio vitoriano no lo es tanto a la hora de abrir sus puertas al aficionado visitante. El resultado es una afición que nunca falla, y que vuelve a sentirse frustrada a la hora de poder seguir a su equipo.
