
Pocos jugadores han maravillado tanto a la afición blanquiazul con su repertorio futbolístico como ‘O Mago’ Djalminha, cuyo fichaje por el Deportivo cumple el lunes 25 años. Las cuatro primeras temporadas del brasileño fueron antológicas, pero sus desavenencias con Javier Irureta le desplazaron del equipo progresivamente y el 27 de mayo de 2004 acordó rescindir su contrato con el club coruñés. Un adiós demasiado gris para tantas noches mágicas que regaló al deportivismo. A continuación les ofrecemos la segunda parte de la entrevista con el ‘canarinho’.
¿Crees que tu final fue un poco triste para la importancia que tuviste en el Depor?
No, para nada. Yo quería ganar, ganar y ganar, no me importaba el final, todo se acaba. Ahora mismo yo no podría jugar en el Depor, aunque me encantaría, pero ya no tengo las condiciones. Entonces, cuando me fui creo que no era más útil. Tenía un año más de contrato, pero no me quería quedar ahí para no jugar y solo estar en la plantilla. Nadie es eterno dentro de un equipo, aunque lo que yo hice va a ser para siempre, la gente no lo va a olvidar jamás, eso es lo que más me importa, no si mi despedida fue feliz o no. Yo dejé el fútbol y no tuve ninguna despedida, pero no es algo que me preocupara. Simplemente lo dejé y se acabó.
¿Qué añoras más de A Coruña y de tu etapa blanquiazul?
No puedo negar que echo mucho de menos el marisco coruñés (risas). Bueno, y también la convivencia de aquel vestuario, de aquel grupo, con aquellos jugadores que recuerdo que nos llamaban el Depor de la Torre de Babel, que éramos de todos los lados. Pero a pesar de las diferencias de mentalidad y de todo lo que había, conseguimos construir un grupo unido y vencedor. Además, edificamos una muy buena relación entre todos. Después de dejar el fútbol, fui a Marruecos a estar con Naybet una semana. Tristán vino a Brasil a pasar una semana conmigo, Turu Flores igual. Fran pasó su luna de miel conmigo en Brasil. Mauro Silva, que hasta hoy estamos juntos aquí. Donato, una persona maravillosa. Esto es lo que más echo de menos, aquel vestuario. A Scaloni, que hoy es seleccionador de Argentina...
¿Imaginabas que Leo acabaría en un banquillo?
Sí, lo esperaba porque siempre ha sido una persona de conseguir unir a un grupo. Tenía la capacidad de llevar a la gente hacia arriba cuando todo se complicaba. No siempre era titular, pero fue un líder y consiguió arreglar la selección argentina, que tenía muchos problemas porque tenía a Messi, pero nada más. Hoy se ve a Argentina mucho mejor, entonces estoy muy contento por todo lo que está haciendo.
Hoy en día el fútbol está demasiado encorsetado y cuesta encontrar jugadores con la imaginación que teníais tú, Ronaldinho o Romario.
Sí, hoy está complicado ver el fútbol. Aquí en Brasil, por ejemplo, el problema está en la base, que ya no les dan libertad a los chavales. Tienen que disfrutar del fútbol cuando son pequeños, pero hoy ya les ponen táctica y no les dejan jugar, y eso acaba un poco con la creatividad. Y por otro lado, falta un poco de personalidad en los jugadores para hacer las cosas distintas. Procuran siempre hacer este juego que muchas veces me aburre de pasar el balón para un lado, para el otro, para la izquierda, la derecha... pasar todo el rato. No, a mí me gustaba coger el balón e ir hacia delante, no me gustaba pasar hacia atrás. Yo era de un sitio del campo que no me permitía pasar el balón para atrás porque no era un defensa, yo tenía que buscar el gol. La gente hoy en día no tiene creatividad, la verdad es que no crea mucho. Hace todo lo que está ordenado por un entrenador y un sistema.
Entre los futbolistas del panorama actual, ¿hay alguno que te encandile especialmente por su estilo de juego?
Los de siempre. Después de mi generación, creo que Messi ha sido el jugador que más me ha encantado, pero ahora ya no es lo mismo. Está Mbappé, pero no es un jugador de las mismas características, sino un futbolista de mucha fuerza, pero no de mucha creatividad. Neymar, que para mí podía hacer mucho más a nivel futbolístico, tiene capacidad para rendir más, está un nivel más arriba, pero también por no lograr más títulos y por mucha polémica ha terminado siendo un jugador poco valorado para el fútbol que tiene.
| ⺠OTRO CURSO EN LA TERCERA CATEGORÃAâEs muy doloroso ver al Depor asÃ; si puedo ayudar de alguna manera, me gustarÃa muchoâ |
| âO Magoâ confiesa que no se perdió ni un segundo de la final del playoff de ascenso. Un duelo con triste final para la afición blanquiazul. Entre ellos, el propio Djalma, que no daba crédito al hecho de que la escuadra coruñesa tenga que jugar âotra vez en la tercera categorÃaâ nacional. Hemos hablado de ti, de Mauro Silva, de Makaay, de Tristán... y ahora vemos al Deportivo en la tercera categorÃa del Depor. Es duro.Para mà es muy doloroso. Hace un mes que hemos perdido la final del playoff con el Albacete. Yo me quedé los 120 minutos mirando cómo estaba el partido y aunque marcaron el 1-0, estaba preocupado, y después pasó lo que pasó y me quedé muy triste. Pensé, no es posible que tengamos que jugar otra vez en la tercera categorÃa. Me quedé muy triste porque tiene un estadio, una afición y una historia magnÃfica. Entonces, si puedo de alguna manera ayudar, me gustarÃa mucho porque ha sido el club en el que yo he jugado más tiempo en mi vida, asà que tengo muchas raÃces tanto en el club, como en la ciudad y la gente. Si quieres ayudar, creo que lo que mejor podrÃas hacer es calzarte las botas de nuevo y venir a jugar, porque seguirÃas marcando la diferencia.No, ahà seguro que no ayudarÃa (se rÃe), los tiempos son otros. Es una pena, es complicado cómo está el Depor, esperemos que todo cambie pronto. Fue increÃble ver una final de la tercera categorÃa con 25.000 personas en Riazor, el ambientazo de la ciudad... recordaba a vuestra época.SÃ, es que yo estuve siguiendo todo por internet, cómo llegaba la gente acompañando al equipo al estadio y me pareció una locura, como cuando ganamos el tÃtulo de Liga, con la calle llena. Son momentos tan distintos, un tÃtulo de Liga y después, una final de un playoff por subir a Segunda División, y la gente ahà apoyando, animando, torciendo... y al final, una pena. A ver si podemos ver al conjunto blanquiazul en Primera División otra vez en el futuro.Ojalá. Echo mucho de menos hacer una visita a A Coruña, porque desde que empezó la pandemia no he vuelto y tengo ganas de ver a toda la gente. |